En los últimos diez años han ocurrido muchas cosas en las distintas naciones de América Latina. Golpeadas repetidamente por acontecimientos de diversa índole (crisis económicas, sociales y políticas), estas naciones han trabajado duro para intentar recuperarse.
Una de las soluciones más populares es la educación. Como solución a largo plazo, la educación de los jóvenes es actualmente la forma más eficaz de combatir la desigualdad.
Muchas organizaciones se han centrado en el estudio del impacto positivo de la educación en la vida de los jóvenes. El Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación, referencia en este campo y particularmente en América Latina, ha dedicado numerosos artículos a este tema.
Cultivar la riqueza del mundo en la mente de los jóvenes les permite, en primer lugar, percibir el mundo de distintas maneras. Permitirles echar un nuevo vistazo a su futuro es darles las claves para tomar las decisiones adecuadas para él.
Educar a los jóvenes de hoy significa contribuir a configurar el mundo de mañana, que estará poblado por personas más capaces de ver las cosas con perspectiva y de actuar con pleno conocimiento de causa.
Educar a los jóvenes hoy significa poner a todos en pie de igualdad mañana en la forma de entender el mundo que les rodea.
Garantizar a los jóvenes el acceso al conocimiento significa darles las llaves del poder. El poder de construir el mundo en el que desean crecer, vivir y florecer.
Si quieres contribuir al mañana, el momento de actuar es hoy. Actúa en favor de la juventud haciendo una donación o compartiendo este artículo.